Los Ángeles CA., 2/27/2003 

La música evoluciona y por eso se renueva a cada instante. Pero hay temas que sobreviven a través del tiempo y, de repente, vuelven a seducir al público gracias a esas modernas versiones que les dan un nuevo aire, un nuevo toque y un nuevo color. Respetuosa y sinceramente.

Eso fue lo que pensó Jenni Rivera cuando decidió rendirle su propio homenaje personal a las grandes estrellas femeninas de la música latina, que la fueron influenciando a medida que iba avanzando y madurando en esa época inicial de su carrera artística.

Son vivencias, ilusiones y sueños imposibles de olvidar, años en que surgen las raíces que se quedan adheridas en el alma de todo artista y van inspirando su trayectoria a futuro en ese tiempo que se conjuga en un presente que nunca pasa de moda. Es algo mágico. Como recordar un primer beso. O un primer viaje. La idea joven que parte del ayer y sigue siendo joven diez o quince años después.

Jenni también siente una franca admiración por las cantantes que imponían sus canciones cuando ella era prácticamente una niña: "Para mí 'Las Grandes' son las intérpretes que dejaron una huella en mi vida y vertieron en mí la pasión por la música y trazaron de alguna manera mi destino. Mi admiración por la melodiosa voz de Marisela, el estilo inconfundible de Chelo, la proyección de una gran intérprete como Lola Beltrán y Lucha Villa, la voz de Yolanda del Río y la expresión de Guadalupe D'Alessio y el talento de la controversial Gloria Trevi que, al margen de sus problemas personales, nadie puede discutirlo. Cada una de ellas, en diferentes categorías, aportaron su valioso talento", agrega La Diva de la Banda.

Dándole un toque de indudable simpatía al homenaje, el primer sencillo de esta grabación se titula "La Papa Sin Ketchup", una canción original de Cesar Lazcano, Quien, además de su contenido irreverente, le dio a su letra un tono de moderno y gracioso enfoque juvenil.